Negociaciones trabadas: una exigencia económica le impediría a Colo Colo retener a una figura

Colo Colo empezó con las negociaciones para armar el plantel de la próxima temporada, pero la situación parece más complicada de lo esperado. La idea era mantener a sus jugadores figura, entre ellos Pablo Solari, por quien surgieron inconvenientes en su renovación.

Luego de acordar su continuidad, Gustavo Quinteros le encomendó a los directivos extender el contrato del Pibe, quien fue una pieza fundamental para el Cacique. Si bien, ya iniciaron diálogo, el club dueño de su pase puso una exigencia económica que podría enredar los planes de Colo Colo.

Pablo Solari llegó a finales del 2020 a Macul proveniente de Talleres de Córdoba, a modo de prueba. El entrenador le vio condiciones para sumarlo como refuerzo y rápidamente se hizo de un lugar como titular indiscutido.

Su buen nivel y sus goles hicieron que la dirigencia lo quiera retener para el próximo año, pero un punto en su contrato genera problemas. Es que el próximo 31 de diciembre se vence su préstamo, y para quedárselo Blanco y Negro deberá abonar 750 mil dólares al contado.

Según el medio El Deportivo, desde el club dueño de su pase piden que el dinero por el 50% de la ficha del argentino se entregue “en efectivo y en una cuota”. “Se está trabajando sobre esa base, pero Talleres se niega a ceder en la posibilidad de hacer el pago en más plazos”, señaló una fuente.

Aún no hubo un acuerdo entre ambas partes, pero desde Colo Colo mantienen las esperanzas de que podrán quedarse con Pablo Solari. Un punto a favor es que el propio delantero ya manifestó sus intenciones de permanecer por un tiempo más en el Cacique.

Otros dos con problemas

Además del Pibe, en el conjunto Albo también quieren retener a otros tres jugadores que se destacaron. Dos de ellos son, Leonardo Gil y Vicente Pizarro, quienes fueron fundamentales para Gustavo Quinteros.

Sin embargo, sus negociaciones no van viento en popa. En el caso del argentino, a fin de año se vence su préstamo y deberá volver al  Al Ittihad de Arabia Saudita. El club tiene la opción de comprar su pase, pero no está dispuesto a pagar los dos millones de dólares para quedárselo y hay dificultades para tener un nuevo préstamo.

En cuanto al canterano, el problema está en la cláusula de rescisión. Colo Colo tenía en mente aplicar una cifra alta para blindarlo, pero su representante pidió un número inferior que le permitiría partir a otro destino en caso de recibir una oferta, algo que Blanco y Negro quiere evitar.