Figura marginada: el jugador de Boca que despertó interés en una leyenda del fútbol y podría irse

Boca lleva ya dos días de pretemporada tras las merecidas vacaciones que tuvo el plantel luego de un año de mucho desgaste. El balance del 2022 resultó ser positivo pese a los sinsabores por lo que significó los dos títulos locales que logró y el protagonismo que alcanzó en aquellos que no coronó. Ahora el objetivo es dar un salto de calidad.

De momento, el Xeneize no cuenta con ninguna cara nueva en un plantel que tiene como objetivo primordial dar pelea en la Copa Libertadores. Mientras el entrenador Hugo Ibarra espera poder incorporar futbolistas de peso, toma diferentes decisiones con el material que cuenta a disposición. La más fuerte quizás tuvo que ver con la que involucró al futbolista Agustín Almendra que se presentó a entrenar, pero luego no quedó concentrado con el resto de sus compañeros. Mientras eso su representante se fotografió con Ronaldo, dueño de Cruzeiro, uno de los clubes que podría sumar al volante de Boca.

Además de trabajar con el mediocampista, Kristian Bereit también nuclea en su agencia a futbolistas de la Selección Argentina que se están jugando el Mundial. En ese contexto se encontró con el astro brasileño con el que publicó una historia en su cuenta de Instagram. A partir de entonces es que comenzó la especulación al respecto de que se trataría de una reunión en la que se habló de una posible transferencia.

Vale recordar que, bajo el gerenciamiento del ex delantero, el cuadro donde surgió deportivamente recuperó su lugar en primera división después de mucho tiempo de sufrimiento en la Serie B. El nuevo proyecto estaría lejos de buscar salvar la categoría, sino más bien ir hacia lo más alto de nuevo. Allí son donde las cualidades del, todavía, hombre del club de La Ribera, seducen.

Decisión tomada

Está claro que la determinación de Boca de separar a Almendra no se basa en un capricho. Ya se conoce su postura de no renovar el contrato que lo une a la entidad hasta junio de este año dándole la alternativa a la dirigencia de no contar con él en estos seis meses de vigencia hasta el final.

El año no fue fácil para el jugador ya que contó con varios actos de indisciplina que mancharon su carrera y atentaron con el bienestar del grupo. Su discusión con el por entonces entrenador Sebastián Battaglia pareció haber sido el límite, aunque una vez que este último dejó su cargo y volvió a entrenar con la reserva. Ahora sí, el final parece cerca.