Así espera su combate: el entretenimiento que ha encontrado Floyd Mayweather en Japón

Luego de vencer a Don Moore en la última exhibición realizada en Abu Dabi en mayo de este año, Floyd Mayweather se prepara para una nueva aventura sobre el ring que tendrá lugar en el Lejano Oriente. En esta oportunidad, su visita se dará en Japón, unas tierras que ya visitó a fines de 2018, cuando noqueó a Tenshin Nasukawa, quien venía de la disciplina del kickboxing, en el Saitama Super Arena.

En el mismo escenario, el ex boxeador estadounidense se presentará para enfrentar a Mikuru Asakura este domingo, un rival que tampoco proviene del boxeo, sino de las artes marciales mixtas. Pero fuera de eso, lo cierto es que Floyd Mayweather aguarda con paciencia la pelea en la prefectura de Saitama, sin apuros y con el goce de una persona adinerada que le permite pasearse por la ciudad en busca de entretenimiento.

Además de continuar con sus habituales entrenamientos con Gerald Tucker, quien se hizo cargo de sus preparativos tras el fallecimiento de Roger Mayweather, “Money” disfrutó de un grato paseo de compras por la capital nipona. De hecho, ha compartido videos en los que se lo ve en tiendas de Louis Vuitton y Hermes situadas en Tokio, además de otra en la que se detuvo a observar relojes con incrustaciones de diamante.

Mira a futuro

Floyd Mayweather no descarta volver al cuadrilátero en el futuro, siempre y cuando pueda garantizarse una buena suma de dinero como la que ganará este domingo en Japón, de donde se llevará aproximadamente entre 15 y 20 millones de dólares. De ahí que tenga en mente realizar otras exhibiciones o, incluso, volver a la profesionalidad por un único combate, donde ya tiene más de un rival en mente.

Por un lado, se encuentra Jake Paul, el hermano de Logan Paul, su rival en la exhibición que se llevó a cabo a mediados de 2021. El otro es Conor McGregor, quien todavía no ha hecho su regreso a la jaula tras la lesión de tobillo que sufrió contra Dustin Poirier en el UFC 264. Cabe resaltar que un duelo con el irlandés, sin duda, le garantizaría una extraordinaria suma de dinero al estadounidense, en especial si recordamos la bolsa que se llevó en 2017, que superó los 300 millones de dólares.